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Los neumáticos son los únicos puntos de contacto del automóvil con el suelo, siendo los protagonistas de la seguridad activa primaria.
De la calidad del contacto neumático – suelo depende en principio la estabilidad y demás aspectos de la dinámica del automóvil.
El contacto con el piso se basa en la adherencia entre la goma de la banda de rodadura del neumático y el suelo, que puede ser de diferentes características y estar seco, húmedo, mojado, muy mojado, sucio ….. lo que afecta a la calidad de adherencia resultante.
Con el suelo mojado el neumático ha de poder desplazar el agua para contactar con el piso y lograr adherencia.
Según aumenta la capa de agua sobre el piso más difícil es lograr el contacto neumático – suelo.
Para disponer de capacidad de drenar el agua sobre el piso se incorporan en la banda de rodamiento del neumático unas esculturas o dibujos con determinada profundidad.
Con suelo seco y totalmente limpio sería mejor prescindir del dibujo para tener más superficie de contacto con el suelo, es el caso de los automóviles de competición con neumáticos lisos “slick”.
Pero un coche de “calle” ha de poder circular en todas las condiciones sobre el asfalto y la lluvia es una de estas.
Sin entrar en detalles de las formas del dibujo, que en muchos casos además de su efectividad se tiene en cuenta la apariencia estética, cosas del marketing, la profundidad determina su capacidad de evacuar el agua hacia el exterior al rodar sobre mojado, es el drenaje que trata de lograr contacto entre la goma del neumático y el piso.
Al girar la rueda se genera una depresión por la cámara formada entre el dibujo y el suelo que expulsa el agua hacia el exterior, por los lados y hacia atrás.
Cuanto más profundidad tenga el dibujo mayor eficacia para drenar agua, pero todo tiene un límite.
Aquaplaning
En la imagen Sin “aquaplaning” Mucho dibujo se aprecia en el coche y el detalle del neumático, con mucha profundidad de dibujo, como se drena el agua hacia el exterior entrando en contacto el neumático con el suelo y logrando adherencia.
En la imagen Con “aquaplaning” Poco dibujo se ve tanto en el coche como en el neumático ampliado, con poca profundidad de dibujo, que no es posible drenar suficiente cantidad de agua, lo que hace que el neumático ruede sobre una capa de agua, con adherencia prácticamente cero, es el efecto de planeo sobre el agua o “aquaplaning”.
El dibujo del neumático tiene una determinada profundidad cuando el neumático es nuevo, unos 8 mm más o menos.
Según se va desgastando la goma de la banda de rodadura este espesor disminuye, con 3 mm la capacidad de drenaje se reduce hasta un 50% y con 1,6 mm, es el valor mínimo admitido legalmente, puede llegar a perder el 80%.
La capacidad de drenaje es variable; la profundidad del dibujo, la cantidad de agua sobre el piso y la velocidad de marcha son las más importantes, pero hay otros detalles.
Si a un automóvil se le montan neumáticos más anchos, la superficie de contacto con el piso seco es mayor, lo que incrementa la adherencia en estas condiciones.
Pero en mojado la cosa cambia, al haber menos presión sobre el suelo es más difícil lograr drenar el agua incluso con dibujo en buen estado, se representa en la imagen Con “aquaplaning” Neumático más ancho.
Se puede resumir así; con unos neumáticos más anchos se incremente la adherencia en seco, por ejemplo un 10%, pero en mojado la merma de adherencia por el riesgo de aquaplaning aumenta hasta más del 40%.
Los neumáticos más anchos (y con menor perfil) tienen bastante atractivo estético por lo que es frecuente que se monten en automóviles, como opción de la marca o después.
Para que se reduzca en lo posible la menor capacidad de drenaje se suelen hacer más anchos los canales del dibujo para favorecer la evacuación del agua.
El límite legal de profundidad del dibujo, 1,6 mm, se controla mediante los indicadores de desgaste.
Son unos resaltes del dibujo con este valor de profundidad, cuando llegan al ras de la banda de rodadura la profundidad del dibujo es de 1,6 mm.
Se localizan estos indicadores buscando en los hombros del neumático alguna de estas referencias (hay ocho repartidas por su circunferencia); “TWI”, una flecha o el logotipo de la marca del neumático.
En esta zona hay en la banda de rodamiento varios indicadores que, además de la profundidad del dibujo informan de si el desgaste es simétrico y equilibrado.
Lo mejor es sustituir los neumáticos a partir de 4 mm de profundidad del dibujo.
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